Hoy quiero hablar de algo que nos afecta a todas las mujeres: la consciencia de separación. Es esa sensación de que no somos lo suficientemente buenas, de que necesitamos ganarnos un lugar en el mundo, de que hay que demostrar nuestro valor para ser aceptadas.
Carmen García Ribas describe nuestra situación como la de mujeres viviendo en una "cultura huésped". Sentimos que necesitamos ganarnos un lugar, demostrar nuestro valor para no ser descartadas. Esto se alimenta de nuestros instintos más básicos de supervivencia como seres sociales.
¿De dónde viene esta sensación? La sociedad, a través de mensajes sutiles pero poderosos, nos ha hecho creer que necesitamos encajar en ciertos estándares para ser felices, encontrar el amor, o simplemente sentir que encajamos. Desde pequeñas, nos bombardean con imágenes de la "mujer ideal", la cual se traduce en una serie de expectativas que nos hacen sentir culpables si no las cumplimos. Si no somos lo suficientemente delgadas, si no tenemos el trabajo perfecto, o si no encontramos una pareja que nos "complete", sentimos que hay algo mal en nosotras.
La culpa es una herramienta que el sistema utiliza para quitarnos poder. Nos hace creer que somos las responsables de nuestra propia infelicidad, y que si no logramos alcanzar esos estándares, simplemente no somos lo suficientemente buenas. Y cuando finalmente, después de mucho esfuerzo y sufrimiento, empezamos a cuestionar el sistema, nuevamente nos hacen sentir culpables. ¡Esta vez por no habernos dado cuenta antes y por todo lo que hicimos por tratar de conformarnos a los estereotipos que nos dijeron que nos garantizaban todo lo que nos mintieron que nos iban a dar si lo alcanzamos!
Quiero que sepas que si estás en esta situación, no es tu culpa. La culpa es la herramienta que usa el sistema para quitarnos poder. ¡No lo permitamos!
Es hora de despertar de esta consciencia de separación. Debemos empezar a valorar nuestra propia esencia, sin importar si encajamos en los moldes que la sociedad nos ha impuesto.
No somos piezas que necesitan ser completadas, somos mujeres completas, valiosas y poderosas. Somos Más Radiantes por ser quienes somos, sin necesidad de demostrar nuestro valor.
Recuerda, no es tu culpa.
¡Sigue brillando!